miércoles, 17 de febrero de 2016

Seagrams

Una hostia, dos hostias. La vida.

Un escalón, otro escalón. Tu casa.

Mírame otra vez. Así, con esa sonrisa. Y dime qué podemos hacer.

No hay nada que cure mejor la misoginia que unos cubatas. De repente todas son guapas.

Y listas, y adorables, y simpáticas. Hasta que de repente... Todas putas.

Una barra, dos barras, tres barras... Mis colegas y yo de parranda.

Ginebra, limón, una. Escríbeme otra sonrisa con el corazón.

Whisky, cola, tres. No creo que estés loca, creo que estás rota.

Agua, hielo, estoy bien. Creí verte, creí tenerte.


No hay comentarios:

Publicar un comentario

Di lo que quieras