lunes, 23 de abril de 2012

jueves, 19 de abril de 2012

Hola, ¿Que tal? ¿Como se encuentra?


Esta es una de esas semanas malas y no creo que pase nada por decirlo. Quiero señalar con esto que dejen a uno enfrentarse con su mierda y más la que yo tengo que se presenta en grandes cantidades.

Tras esta aclaración hablaré de este titulo en el que aparecen esas preguntas que haces a personas que no sueles ver y que a veces te molesta volver a hacerlo. Aceptemos que cuando uno va por la calle hay cierta gente a la que no quiere ver y con ello recurrimos al viejo truco de mirar la hora ya sea reloj o móvil o el que menos me gusta que consiste en agachar la cabeza.

¿Mi solución? Saludar, efusivamente. Si no quiere verte le resultará mucho más embarazoso y si por el contrario quiere puedes acabar con un "Si, quedaremos un día." Lo que se convierte en una malvada mentira que puede dejarte un buen sabor de boca.

Este articulo no tiene mucho sentido por ello su conclusión tampoco la debe tener así que acabo parodiando al gran Rubén Pozo, ese gran guitarrista que intento ser columnista musical en Rolling Stone, y solo me queda decir una cosa para finalizar este despropósito.

Canción del mes: Chavalita de Rubén Pozo de su disco Lo Que Más.

domingo, 1 de abril de 2012

Momentos Musicales 2

El amor, sus preguntas y una eterna indecisión en este campo.

¿Son malas las mujeres o somos muy imbéciles los hombres? ¿La mayoría de los hombres no buscan ser amados? ¿Las niñas de Papá (ahora Loewe) maduran? ¿Algunas excusas son sinceras o meditadas? ¿Le he dicho lo que sentía de verdad?

Son cuestiones que a veces me planteo, que rondan mi cabeza en los momentos de reflexión y que alguna vez me han quitado el sueño. Todos nos lo hemos preguntado en una relación o en el complicado cortejo si de verdad lo que pasaba era lo que queríamos que estuviese pasando pero nunca sabíamos que responder.

Empezando a responder diré que claro que hay mujeres malas pero tantas como hombres listos o malos que utilizan a las mujeres, hay que decirlo. Y no hay que callar que los hombres quieren ser amados, somos algo más que fachada y dureza, siempre hay algo más. Nos gusta hacer creer que no la necesitamos o que con la compañía de nuestro ego nos basta pero eso es falso. En ambos sexos se defiende esta postura de autonomía porque es la que atrae y con la que menos se pierde.

Terminando vale la pena expresar mi duda ante las tres últimas preguntas, no sé si todas las niñatas maduran o si las excusas de la gente son siempre sinceras, las mías al menos buscan serlo.Pero la gran duda se presenta con la última cuestión ya que no siempre digo la verdad y a veces me he callado cosas que realmente sentía, no he encontrado una respuesta completamente adecuada a esta pregunta.